La adopción de la tecnología e-SIM y la demanda de conectividad IoT potencian la evolución de las soluciones SIM tradicionales.
El mercado de las tarjetas SIM (Subscriber Identification Module) experimentará un crecimiento sostenido con una tasa compuesta anual (CAGR) del 9,7 % entre 2024 y 2029, generando un incremento de USD 2.654,1 millones en el período. Esta expansión refleja la creciente adopción de la comunicación M2M (Machine to Machine) y la conectividad del Internet de las Cosas, así como la transición global hacia redes móviles de quinta generación (5G).
El auge de las tarjetas e-SIM, integradas y no removibles, representa uno de los principales motores de este crecimiento. Con la introducción de dispositivos móviles que incorporan e-SIM y la creciente popularidad de los teléfonos de doble SIM (que combinan una tarjeta SIM tradicional y una e-SIM), los fabricantes de smartphones están reforzando su apuesta por estas soluciones integradas. Este fenómeno se ve amplificado por el rápido ciclo de reemplazo de dispositivos móviles: en los mercados desarrollados, los usuarios renuevan sus teléfonos en menos de dos años, mientras que en los emergentes lo hacen cada dos o tres años. Así, la actualización constante de smartphones y otros dispositivos alimenta la demanda de e-SIM y consolida su posición en el mercado.
Según el análisis de Technavio, varios factores están impulsando este repunte:
- La migración masiva hacia redes 5G, que requiere tarjetas SIM y e-SIM de última generación para soportar la nueva infraestructura.
- El desarrollo de tipos híbridos de SIM, que ofrecen más flexibilidad a los usuarios y permiten la convivencia de diferentes tecnologías.
- La mejora de la calidad de servicio por parte de las empresas, que buscan ofrecer experiencias más fluidas y seguras a sus clientes.
No obstante, el sector también enfrenta ciertos retos. La obligación de registrar las tarjetas SIM sigue siendo un obstáculo en algunos mercados, al igual que la acumulación de inventarios antiguos que ralentizan la producción de nuevas tarjetas. Por otro lado, el creciente interés en la provisión remota y la reprogramación de las SIM reprogramables también supone un desafío para los actores tradicionales del mercado.
Desde la perspectiva de la investigación de mercado, el segmento de tarjetas SIM forma parte de un ecosistema más amplio que abarca equipos de comunicaciones, hardware tecnológico, almacenamiento y periféricos, componentes electrónicos y soluciones industriales. La demanda de dispositivos de prueba y medición más sofisticados, impulsada por la transformación digital en industrias como la automoción, los semiconductores, la energía y los dispositivos médicos, fortalece a todo el mercado de equipos electrónicos.
En el sector de las comunicaciones, la evolución hacia tarjetas SIM avanzadas como Nano SIM y Micro SIM, junto con el continuo despliegue de redes móviles y la ampliación de la cobertura, refuerzan la tendencia alcista. Las operadoras móviles están aprovechando este crecimiento para mejorar la personalización y las capacidades de las SIM, facilitando la autenticación multifactor y el aprovisionamiento remoto, elementos clave para las aplicaciones de IoT y la conectividad global. Así, la convergencia de estas innovaciones marca un nuevo horizonte para el mercado de las tarjetas SIM, que seguirá siendo un pilar tecnológico fundamental en la próxima década.
(Technavio Research)